Si
tienes que presentar una investigación y no sabes por dónde empezar,
despreocúpate, a todos no pasa lo mismo. Lo importante es que aquí te
presentamos algunos tips para que esto deje de ser un problema.
Si tienes que enfrentar en tu carrera profesional algún
trabajo de investigación, aquí te dejamos algunos de los pasos que pueden
servirte como opción:
Identifica el tema de
investigación
El primer paso que debes dar ronda sobre la elección del tema, por ende te
debes preguntar ¿Qué es lo que voy a investigar?
Una vez que definas esto, deberás delimitar las áreas sobre las que vas a
trabajar, lo cual te va a enfocar sobre las temáticas que van a quedar
excluidas en el tema. Las delimitaciones que elijas podrán ser acordes a límites
cronológicos, espaciales, temáticos, geográficos, etarios, demográficos,
sexuales etc. del tema u objeto de estudio.
Identifica que tipo
de investigación llevarás a cabo
Seguramente tendrás que definir el tipo de investigación que vas a llevar según la realización de un trabajo original creado desde cero, basado
en premisas previas que dispararon la elección del tema; o desde una investigación
basada en varias hipótesis de otros expertos, a través de
las cuales llegarás a una conclusión propia haciendo converger distintos puntos sobre un tema.
Justificación
Todo tema elegido debe justificarse. Para esto se debe tener en cuenta la originalidad, la pertinencia y la utilidad del tema a
tratar. Se puede trabajar sobre un tema que ya se haya tratado
antes, siempre que la originalidad este presente y que el trabajo consista en un
nuevo enfoque.
Recolección del material
El material va a ser sumamente variado, ya que te podrás valer de numerosos
recursos, lo que debes procurar es enfocarte en reunir información
que responda a la hipótesis del tema que hayas elegido.
Marco
metodológico
¿Elegirás el enfoque cualitativo o
cuantitativo? Si bien ninguna investigación es netamente de una
u otra forma, uno de los dos enfoques va a prevalecer en el trabajo. En el
cualitativo utilizarás datos como:
información blanda, entrevistas, observaciones, archivos, etc; mientras que desde
la perspectiva cuantitativa utilizarás más bien: análisis estadísticos,
estudios de muestra y encuestas, entre otros.